jueves, 25 de abril de 2013

TU VERDAD DEJAME VER


Quiero arrancar agradeciendo a todos aquellos que ofrecieron su vida (literalmente), para dejarle al porvenir una nación libre. Aquellos que solamente por el ansia de comandar sus propios destinos dejaron su sangre en el suelo, regaron un territorio entero de valentía, convicción, amor, sufrimiento, sacrificio, y todos los adjetivos calificativos que se les pudiera ocurrir para describir a aquellos bravos e intrépidos hombres.
Todo aquello ¿para qué?... Nuestra realidad le escupe las tumbas, mancilla sus nombres; los que tomaron la posta año tras año, lustro tras lustro, década tras década, se encargaron de ir derribando esos enormes muros de idealismo y lealtad al pueblo... Todo aquello ¿para qué?... Para nada... 

BIENVENIDOS A "EL LIBELO DE LA REALIDAD"

Tiempos tumultuosos para el mundo si los hay, y nuestro país por supuesto no escapa al último grito de la moda en esta era hiper mega globalizada.

Las aglomeraciones mediáticas contra los gobiernos, los conjuntos políticos contra los medios, y entre eso, casi como olvidado está aquello que dieron en llamar "el pueblo". El mismo que "elige", aquel que acierta, que se equivoca, que destituye y que también restituye. El que desconcertado va para una punta, corre para la otra, exige, clama, aprueba, protesta, se inmoviliza...

En esta ciclotimia poblacional, se delinean claramente tres facciones, a saber: los lobotómicos, que ya no razonan, están a muerte con el primer buzón que se les ofrece; los personalistas, que analizan todas las variables ofrecidas y sacan sus propias e íntimas conclusiones; y los apóstatas, que perdieron hasta la fe en los santos.

Cada uno que se pare en la línea que le plazca, ahí radica la libertad del ser. Pero no hay que olvidar las bases de esta gigante estructura, los cimientos hechos a sudor y lágrimas. Somos egoístas por naturaleza, por ser individuos; si esto no se puede cambiar, tratemos al menos de ser un poco más sensatos a la hora de actuar, porque en definitiva somos parientes del resto de la jauría.

Muchas gracias por vuestra atención.



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